Las múltiples propiedades del aceite de oliva están más que demostradas y, cada poco tiempo, surgen nuevas investigaciones que descubren beneficios adicionales de este valiosísimo producto. Lo que no sabíamos hasta ahora era que el considerado pilar de la Dieta Mediterránea podría equipararse a la leche materna en cuanto a sus propiedades.
Así lo ha asegurado el investigador del CNR-IGV (Instituto de Genética Vegetal del Consejo Superior de Investigaciones Científicas italiano), Saverio Pandolfi. Este científico ha asegurado que un aceite de oliva virgen extra de calidad es la grasa más similar a la leche materna que podemos encontrar. Si estamos ante un aceite de oliva correctamente procesado, los niveles de ácidos grasos esenciales omega 3 y omega 6 en el producto final son muy similares a los que se encuentran en la leche materna, una característica que haría que esta grasa sea particularmente agradable para los niños.
En nuestro país, los expertos también recomiendan el aceite de oliva como grasa fundamental en la alimentación de los más pequeños. La Asociación Española de Pediatría (AEP), a través de su «Decálogo sobre las grasas en la alimentación de niños y adolescentes«, recomienda su utilización, asegurando que es muy importante, tanto por su aporte calórico como su función en la prevención de las enfermedades crónicas más prevalentes. Así, los pediatras recomiendan iniciar un periodo de transición a partir de los 6 meses, introduciendo una cucharada de aceite de oliva en los purés de verduras (que, además, mejora su palatabilidad); y a partir de los 2 años convertir el aceite de oliva en la grasa principal de la alimentación.
Saverio Pandolfi: «Un aceite de oliva virgen extra de calidad superior es la grasa más similar a la lecha materna que podemos encontrar»
Al respecto de los lípidos, según la AEP, «los ácidos grasos oleico, linoleico y α-Ln están involucrados en el mantenimiento de unas adecuadas concentraciones de colesterol, triglicéridos y glucosa en sangre, y de la tensión arterial, así como en la prevención de enfermedades cardiovasculares y enfermedades autoinmunes, con efectos demostrados en adultos. Aunque los datos en la infancia no son concluyentes, sí es cierto que las recomendaciones se hacen por extrapolación. Los ácidos AA, EPA y especialmente el DHA son importantes para la función visual y el desarrollo neurocognitivo en prematuros y recién nacidos, por lo que se consideran semiesenciales durante este periodo. Además, actualmente se está evaluando su papel en la génesis de distintas enfermedades asociadas a la prematuridad. El DHA se utiliza también en el tratamiento de determinadas condiciones, como la fibrosis quística y las enfermedades metabólicas (aminoacidopatías, trastornos del ciclo de la urea, enfermedades peroxisomales), y se investiga su papel en la patogenia de los trastornos de déficit de atención/hiperactividad (TDAH), autismo, caquexia cancerosa, etc.».
En países de fuerte tradición oleícola, como Italia, los pediatras recomiendan también el consumo de aceite de oliva para los bebés que sufren de cólicos, ya que este tipo de grasa puede facilitar el proceso gástrico natural. Es fácil de digerir y ayuda al funcionamiento gástrico, evitando el estreñimiento y los cólicos, tan comunes en los niños de corta edad.Además, el aceite de oliva contiene oleuropeína, una sustancia anti-inflamatoria natural que reproduce los efectos naturales de ibuprofeno, el ingrediente activo ampliamente utilizado en la producción de medicamentos para el dolor.
Pero no sólo eso, el ácido linoleicoque contiene es fundamental para el desarrollo del cerebro. También ayuda a la absorción de la vitamina D, importantísima para el crecimiento de los bebés y los niños, ya que regula el calcio y el fósforo y estimula la ingesta de minerales que son esenciales para el proceso de osificación. Esto le da a los niños una mayor protección contra las fracturas óseas en la infancia y previene el riesgo de osteoporosis en la vejez.
¡Apostemos por dar a nuestros hijos lo mejor desde pequeños!
MARINA
07/08/23
Hola...Soy mamá de una beba de 4 meses; toma leche de formula pero como toma al límite su pediatra me aconsejo que a cada biberón le agregue aceite de maiz para aumentarle la carga energética, puede ser que le cause cólicos?...Se le puede sustituir por el aceite de oliva?