Pasados los 60 años, apostar por las grasas vegetales, como el aceite de oliva, y aquellas procedentes de algunos pescados podría hacer que vivamos hasta 15 años más. Así lo asegura, al menos, un estudio llevado a cabo por un grupo de investigadores de la Universidad de Uppsala, en Suecia. La muestra se realizó sobre un total de 4.200 personas mayores de 60 años.
Estos investigadores han estudiado las tasas de ingesta de diferentes tipos de grasas en cerca de 2.200 mujeres y 2.000 hombres suecos de más de 60 años. En los quince años sucesivos, 265 hombres y 191 mujeres fallecieron, mientras que otros 294 hombres y 190 mujeres sufrieron un problema cardiovascular. Analizando los datos sanguíneos de los participantes, los científicos concluyeron que quienes aportaban tasas más altas de ácidos grasos de procedencia vegetal, como el aceite de oliva, presentaban un 27% menos de riesgo de fallecimiento, en el caso de los hombres (aunque no fue tan significativo en mujeres). Por su parte, los ácidos grasos presentesen pescados, como el salmón o la trucha, se asociaron a un descenso de la mortalidad de un 20%, tanto en el caso de hombres como en el de mujeres.
Los resultados del estudio se han publicado en la revista médica americana Circulation y aseguran que las grasas buenas pueden ayudar a ganar 15 años de vida, de media. Los investigadores son conscientes de los límites de este estudio, ya que la toma de sangre para determinar la tasa de grasa sólo se ha efectuado una vez por cada paciente. Son necesarios más estudios para determinar también las diferencias en el riesgo inicial para hombres y mujeres y medir más datos.
A pesar de ello, el mensaje es muy claro: tomar grasas procedentes de los vegetales, como nuestro aceite de oliva, así como del pescado, reducir las grasas animales y hacer ejercicio físico de manera regular puede hacer mucho bien a nuestro cuerpo.