Nueve de cada diez españoles come pan a diario, según una encuesta de Simple Lógica. Esto hace que cada persona consuma al año una media de 27,35 kilos de este básico de la gastronomía, según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Sin embargo, pese a su arraigada tradición en cocinas de todo el mundo, el pan no ha sido ajeno a la industrialización. Por eso, saber cómo reconocer un buen pan es fundamental para seguir una dieta realmente saludable.
El pan, del artesanal al industrial
La historia del pan se remonta miles de años y su receta sigue basándose en tres ingredientes tan esenciales como son la harina, el agua y la sal, aunque la forma de integrarlos pueda dar lugar a cientos de tipos de panes. No obstante, en la actualidad, la diferencia de calidad entre una barra y otra puede ser abismal y ya no sólo por su apariencia o sabor.
Ten en cuenta que los panes industriales incorporan aditivos, levaduras químicas y un exceso de almidones y azúcares muy perjudiciales para el organismo. Sólo así se consigue aumentar los periodos conservación y prolongar su vida útil de este perecedero producto, acortar los plazos de elaboración y abaratar costes e incentivar un mayor consumo, haciéndolos más atractivos y adictivos. ¿Las consecuencias de esta mercantilización? Son muchos los estudios que asocian el consumo de estos panes con problemas de obesidad, colesterol y riesgo cardiovascular. Vamos, que lo de “las penas con pan son menos penas” parece que pierde vigencia… si no sabes cómo reconocer un buen pan.
¿Cómo reconocer un buen pan?
¿Cómo conseguir identificar los panes de calidad? No es una cuestión sencilla, ya que en este sector no es oro todo lo que parece. En ese intento de atraer a un consumidor cada vez más consciente sobre su salud, muchos establecimientos tratan de enmascarar panes de baja calidad con técnicas de marketing. Es decir, un local con un restyling que le da un rollo artesanal, una barra de aspecto rústico o una bolsa de papel reciclado para guardar el pan no son parámetros para saber cómo reconocer un buen pan entre la amplia oferta del mercado.
¿En qué debes fijarte entonces?
- Ingredientes simples: Un buen pan se compone de harina, agua, sal y levadura o masa madre. Evita aquellos con una extensa lista de componentes desconocidos.
- Corteza crujiente: La corteza debe ser dorada, algo gruesa y crujiente, un signo de que ha sido horneado correctamente. Además, debe desprenderse fácilmente cuando se toca.
- Aroma agradable: El pan de calidad tiene un aroma distintivo y agradable, que refleja el proceso de fermentación y los productos de origen natural. Es decir, el pan debe oler a pan.
- Miga bien formada: También puedes ver cómo reconocer un buen pan al cortarlo. La miga debe ser esponjosa y con alveolos (agujeros) irregulares y de tamaño grande, lo cual indica una buena fermentación y el uso de horno artesanal.
- Peso adecuado: Un pan bien hecho no debe ser demasiado ligero, sino más bien pesado y denso. La ligereza excesiva puede indicar el uso de agentes de levadura rápidos.
- Durabilidad: Un buen pan artesanal puede durar varios días sin perder su calidad, a diferencia del pan industrial que se pone duro o gomoso rápidamente.
- Color natural: Los panes artesanales tienen colores naturales, sin tintes artificiales. Un buen pan integral, por ejemplo, tendrá un tono marrón oscuro, no exageradamente negro.
- Sabores complejos: Otro elemento sobre cómo reconocer un buen pan es que la fermentación natural da lugar a una paleta de sabores complejos que los panes industriales no pueden replicar.
- Sin aditivos ni conservantes: La ausencia de aditivos es crucial. Un buen pan no necesita conservantes para durar más de lo necesario. Si no puedes leer la etiqueta, pregunta directamente al panadero o vendedor.
- Procedencia y elaboración: Los mejores panes suelen ser elaborados en pequeñas panaderías artesanales que cuidan cada detalle del proceso de fabricación, desde la selección de los ingredientes hasta el horneado. Fíjate por ejemplo en la base del pan, si está lisa se ha hecho en horno de piedra; si tiene hendiduras, se deben a las rejillas que se usan en hornos con ventilador característicos de la panadería industrial.
Con estas pautas, no sólo disfrutarás de un producto más sabroso, sino que sabrás cómo reconocer un buen pan, de calidad, saludable y nutritivo ideal para el desayuno, comida, merienda o cena. ¿Quieres más consejos gastronómicos y trucos de cocina? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe en tu email nuestras recetas y las mejores recomendaciones nutricionales.
