El pescado es una de las mejores fuentes de proteínas que podemos encontrar en el mercado y algunas variedades, como la dorada, las podemos encontrar prácticamente durante todo el año en los mercados, ya sea procedentes de piscifactoría o, durante los meses más cálidos del año, su versión “salvaje”. Es, además, un pescado muy versátil, que permite diferentes preparaciones. ¿Quieres saber cómo cocinar la dorada?
Dorada Al horno
Una de las formas más sencillas y rápidas de preparar la dorada es al horno. Para aportar aún más sabor, podemos preparar una marinada con aceite de oliva, zumo de limón y especias como perejil o tomillo y dejar el pescado en la mezcla durante media hora antes de poner en el horno durante unos 20 minutos a 220ºC (o algo más, dependiendo del tamaño de la dorada).
Si, además, quieres aportar un sabor más exótico, puedes añadir unas cucharadas de salsa de soja a la marinada.
Dorada en papillote
La técnica del papillote es muy útil por dos razones: en primer lugar, podemos cocinar el pescado lentamente, manteniendo todos los sabores, pero también permite no agregar demasiada grasa. Para el papillote es suficiente con agregar un chorrito de aceite de oliva y alguna especia que nos guste.
Además, podemos añadir alguna verdura u hortaliza, como cebolla, puerros, calabacín o champiñones.
Dorada en ceviche o carpaccio
Si buscáis una preparación más fresca, la carne de la dorada también es perfecta como ingrediente de ceviches o carpaccios. Para prepararla en ceviche, solo hay que cortar la carne de la dorada en dados u “cocinarla” en una marinado de zumo de lima, un chorrito de aceite de oliva, cebolleta picada muy fina, jengibre rallado, pimienta, sal y, si os gusta el picante, una guindilla fresca cortada en láminas. Se deja macerar durante 30 minutos y se sirve.
En el caso del carpaccio, hay que cortar filetes muy finos de dorada y, con ayuda de film transparente y una maza de cocina, aplanarlos dando golpecitos. Los disponemos en un plato y añadimos una marinada de salsa de soja, aceite de oliva, zumo de limón y cilantro picado.
A la sal
Por último, otra de las preparaciones que permiten mantener el pescado jugoso y con todos sus sabores naturales es a la sal. Para prepararla, debemos pedir en la pescadería que no hagan cortes en la superficie de la dorada, con el fin de que no absorba más sal de la necesaria.
A continuación, solo tenemos que hacer una cama con sal gruesa (la venden especial para este tipo de preparaciones), que humedeceremos con agua, y disponer el pescado encima. Sobre el pescado pondremos otra capa generosa de sal (también humedecida) y la compactaremos bien para que quede “sellado” el pescado en su interior, dejando fuera la cola y parte de la cabeza. Lo meteremos en el horno, a 200ºC, y calcularemos 20 minutos de cocción por cada kilo de pescado. Un buen truco es, como comentábamos, dejar parte de la cabeza fuera de la sal, ya que cuando el ojo del pescado esté completamente blanco sabremos que está listo.
Después solo hay que quitar la capa de sal con ayuda de un cuchillo afilado y procurar sacar los filetes limpios de sal.
¿Qué otras preparaciones soléis usar vosotros para la dorada?
