Ingredientes
- 75 g de cebolla finamente picada
- 75 g de mantequilla
- 75 ml de aceite de oliva virgen extra Gran Selección
- 225 g de harina
- 320 ml de leche
- 2 huevos
- 300 g de recortes de jamón ibérico picado finamente
- Para freír: aceite de oliva suave La Española
Preparación: cómo hacer las croquetas de jamón perfectas
- Cuece el huevo a partir de agua fría con sal durante 10 minutos, enfría, pela y pica finamente.
- Coloca la leche en una cazuela con doble fondo añadiendo primero una cucharada sopera de agua, para que no se nos pegue la leche en el fondo al reducirla.
- Reduce a fuego suave los 320 ml de leche hasta obtener 2.000 ml.
- Funde la mantequilla junto con el aceite de oliva virgen extra Gran Selección La Española en una cazuela, añade la cebolla picada y póchala durante 5 minutos hasta que la cebolla esté tierna. En ese momento, le añades la harina, mezcla bien y cuece durante 5 minutos a fuego medio sin que coja color.
- Deja enfriar bien la roux para que luego no nos forme grumos.
- Añade la leche reducida y calienta, poco a poco, mezclando continuamente la masa.
- Pasa la batidora para unificar el sabor de la cebolla y obtener una masa bien lisa, fina y homogénea.
- Deja cocer hasta que tengas la untuosidad o la cremosidad deseada, 12 minutos aprox. Retira del fuego, añade el huevo picado, mezcla, agrega el jamón picado y vuelve a mezclar bien.
- Rectifica el punto de sal.
- Una vez hecha la masa, la vuelcas en una bandeja forrada con papel sulfurizado y untado con un poco de aceite. Cubre con papel film.
- Enfría la masa en la nevera durante una noche.
- Al día siguiente, bolea las croquetas untándote las manos con un poquito de aceite para que no se nos pegue la masa. Deja enfriar las bolas en la nevera mínimo 3 horas antes de empanar.
- Pasado el tiempo, pasa las bolas por harina. Coloca la harina en una bandeja y con las palmas de las manos, toca la harina, aplaude para quitar el exceso y bolea nuevamente las croquetas. Seguidamente, pasa por huevo batido y deja escurrir el exceso de huevo en una bandeja con agujeros. Por último, empana con el pan rallado. Podemos freírlas seguidamente, pero si son para la noche y las hicimos por la mañana reserva en la nevera hasta antes de freír, sacándolas una hora antes para que se atemperen y al freírlas no queden frías por dentro. Si queremos congelarlas, colócalas en una bandeja ordenadamente y congela.
- Fríelas en una sartén o freidora con aceite de oliva suave La Española a 200º c hasta que se doren y estén bien calientes por dentro. Sirve.