Receta fácil de lasaña de carne a la boloñesa

Ingredientes

Ingredientes para 4 comensales:

• 1/2 kg de carne picada
• 2 botes de tomate frito
• 1 paquete de láminas de lasaña
• 1 paquete de queso rallado
• 3 dientes de ajo
• 1 cucharadita de piñones
• 1 cucharadita de orégano
• 2 vasos de leche
• 40 g mantequilla
• 1/2 vaso de harina
• Aceite de oliva intenso La Española
• Sal, pimienta negra molida y nuez moscada al gusto

Receta paso a paso de lasaña de carne a la boloñesa

La lasaña de carne a la boloñesa es una deliciosa y reconfortante receta de origen italiano que ha conquistado paladares en todo el mundo. Esta exquisita combinación de finas láminas de pasta intercaladas con una rica salsa boloñesa y abundante queso derretido, es un verdadero placer culinario que te transportará a la tradicional cocina italiana.

La historia de la lasaña a la boloñesa se remonta siglos atrás, a la región de Bolonia, conocida como la cuna de la pasta fresca en Italia. Fue en esta tierra de sabores y tradiciones donde nació la salsa boloñesa, una mezcla de carne de res, tomate, cebolla y hierbas aromáticas que se convirtió en la base perfecta para acompañar la lasaña.

La preparación de esta receta es todo un ritual gastronómico para conseguir como resultado una lasaña a la boloñesa, jugosa, reconfortante y llena de carácter italiano.

Esta receta clásica y atemporal es ideal para compartir en familia o deleitar a tus invitados en ocasiones especiales. Su irresistible combinación de sabores y su presentación apetitosa hacen que esta lasaña sea una opción culinaria irresistible. Prepárala y deja que el aroma y sabor de Italia invadan tu hogar, transportándote a la bella región de Bolonia en cada bocado. ¡No podrás resistirte a su encanto italiano! Sin embargo, si estás buscando una alternativa algo más saludable y ligera, apunta también la deliciosa lasaña de verduras, una versión vegetal que te sorprenderá.

¡Apunta el paso a paso!

1. Para hacer la carne, la salpimentamos y le añadimos el orégano amasándola con las manos. La dejamos una media hora antes de comenzar a cocinar la lasaña para que coja bien el sabor de las especias.
2. Podemos dejar la pasta cociendo antes de ponernos manos a la obra con todo lo demás. Para ello, ponemos una cacerola con agua abundante y sal al gusto, y dejamos hirviendo las placas de pasta de lasaña hasta que queden al gusto de cada uno. No es aconsejable que queden muy blandas para luego poder montar bien la lasaña, por lo que al dente es la mejor opción. Cuando estén listas, las sacamos de la cacerola con una espumadera para no romperlas y las dejamos estiradas sobre un paño limpio.
3. Ahora que ya tenemos la carne con un buen sabor, vamos a comenzar a prepararla. Para ello, en primer lugar doramos los dientes de ajo en una sartén grande con aceite de oliva virgen muy caliente.
4. Ahora echamos la carne con los piñones y la mezclamos bien con los ajos y el aceite para que coja el sabor. Está bien tener la sartén a fuego medio alto para evitar que la carne se quede cruda, pero a la vez que no se nos queme.
5. Cuando la carne haya cogido buen color, echamos el tomate y lo mezclamos bien dejándolo a fuego más bajo. Pasados unos 10 o 15 minutos, quitamos la sartén del fuego y dejamos la carne reposar.
6. Para hacer la bechamel necesitamos una cacerola no muy alta y bastante ancha. Echamos la leche y esperamos al momento en que empiece a hervir. Entonces, bajamos el fuego al mínimo y añadimos la harina junto con la nuez moscada y la sal y pimienta. Con la ayuda de una batidora, mezclamos todos los ingredientes hasta que quede una salsa de bechamel sin grumos.
7. Con la carne y la bechamel hechas, ya podemos montar la lasaña a la boloñesa. Para ello, ponemos una capa de placas de pasta en la fuente que vayamos a utilizar, seguida de una capa de carne y otra de bechamel, y así sucesivamente hasta agotar todos los ingredientes. A la hora de comerla, añadimos queso rallado por encima y la metemos al horno a calentar y gratinar.