Ingredientes
Ingredientes para 6 comensales:
- 500 gr de harina mezcladas
- 25 gr. de levadura fresca
- 120 gr de mermelada de fresa
- Medio vaso de semillas de sémola
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen
- 1 cucharadita de sal
- Jengibre rallado
- Canela molida
- 280 ml de agua tibia
Preparación
No hay mucha gente que se anime a hacer pan en casa, bien porque no tiene tiempo, o bien porque ya le salió una vez mal y no ha querido aventurarse de nuevo. Esperamos que con este pan rústico de mermelada de fresa más gente se lance a hacer pan casero, pues es mucho más saludable y, una vez coges soltura, te vuelves adicto.
1. Lo primero que tenemos que hacer es poner la harina mezclada en un bol suficientemente amplio y construir un volcán con ella. Entonces, vamos a diluir la levadura fresca en agua tibia y la vamos a echar en el hueco del volcán.
2. Amasamos bien la harina con la levadura diluida y ańadimos la sal a la mezcla. Es importante que amasemos bien con las manos para que, conforme vayamos ańadiendo más ingredientes, no queden grumos.
3. Ahora echamos el aceite de oliva virgen y continuamos amasando hasta ańadir la mermelada de fresa, el jengibre, las semillas de lino y la canela. A pesar de esta gran mezcla de ingredientes, es importante continuar amasando con las manos hasta que tengamos una masa más o menos uniforme.
4. Enharinamos un encimera limpia y amplia, y colocamos la masa de pan sobre ella para seguir trabajándola hasta conseguir que sea maleable. Entonces, hacemos una bola con la masa y la colocamos dentro del bol otra vez dejándola reposar cubierta con un trapo húmedo durante una hora más o menos, o hasta que doble su volumen.
5. Pasado este tiempo, volvemos a trabajar la masa en la encimera enharinada y le damos la forma que más nos guste para hacer el pan rústico a nuestro gusto. Entonces, lo dejamos reposar dentro del horno (apagado) durante media hora antes de cocerlo.
6. Por último, metemos el pan en el horno precalentado a 220ş entre 40 y 50 minutos más o menos, dependiendo del grosor de la forma que le hayamos dado.