Seguramente alguna vez has detectado la aparición de grumos en el aceite de oliva que tienes en casa.
Aceite de oliva con grumos, descubre los motivos que provocan su aparición
Para explicarlo, comparemos el proceso de congelación del aceite de oliva y el del agua:
El agua, es un líquido homogéneo compuesto únicamente por moléculas de H2O . Por tanto, todas sus partículas se congelan a la vez, ya que tienen el mismo punto de congelación; los 0º.
A medida que va bajando la temperatura el movimiento continuo de las moléculas de agua se va reduciendo hasta que al llegar a los 0º, el movimiento de las moléculas de H2O se detiene y el agua pasa de estado líquido a sólido.
¿Por qué el aceite de oliva se pone blanco?
En el caso del aceite de oliva, el proceso que siguen las partículas es el mismo. La diferencia principal es que el aceite de oliva no es tan homogéneo como el agua, pues está formado por diferentes partículas llamadas triglicéridos. Cada una de estas partículas, dependiendo de su composición de ácidos grasos, tiene su propio punto de fusión, desde los 23ºC a temperatura menores de 0ºC. Cuando el aceite de oliva se encuentra a bajas temperaturas estas partículas empiezan a solidificarse de forma progresiva. Este es el motivo por el que aparecen esos cristales sólidos de color blanquecino.
¿Significa esto que el aceite de oliva está en mal estado?
No hay de qué preocuparse, el aceite de oliva está en perfecto estado, de hecho, congelando el aceite conseguimos que se conserve a la perfección sin que pierda propiedades. Este proceso es totalmente natural y no tiene relación con la calidad del aceite ni influye sobre ella.
En condiciones normales, en muchos puntos de España el aceite de oliva puede llegar a solidificarse a temperatura ambiente, sin necesidad de conservarlo en el congelador. En estos casos, es preciso tener en cuenta que a la hora de conservar el aceite de oliva es mejor conservarlo a temperaturas bajas que a temperaturas altas, ya que a altas temperaturas se pierden partículas volátiles y aromas. En el momento que queramos recuperar el estado líquido del aceite lo único que tenemos que hacer es conservarlo a una temperatura mayor de 23ºC, ya que el proceso de solidificación del aceite es totalmente reversible y no genera ningún problema o pérdida de calidad.